ANALISIS ENTRE UNA OBRA ABSTRACTA, UNA EXPRESIONISTA Y UN ANUNCIO PUBLICITARIO

LAS TRES OBRAS

La primera obra se llama “A la orilla del mar no. 2” su autor el pintor abstracto Robert Motherrwell, ingresa en una base de líneas y manchas que nos da la idea de un mar. El rojizo es la playa, el gris el mar y el negro el horizonte. Unas machas asemejan una persona con los brazos abiertos. El hombre y el horizonte van del mismo color oscuro, pero a diferencia del segundo, la figura humana está rodeada de amarillo. La playa significa la realidad, el mar el interior de la persona y el horizonte el futuro, la perspectiva. La segunda obra es del expresionista figurativo del Alemán Wassily Kandinsky, La Ludwigskirche, es la parte inferior de la fachada principal de la iglesia de St. Ludwig. Las figuras recrean la salida del templo de una iglesia, que están esperando a que salga una procesión, esto nos permite contextualizar la obra a fines del siglo XIX por lo largo de los vestidos, los paraguas, los sombreros. El pintor utiliza los colores para significar el sentido psicológico de la procesión. 

El siguiente es un anuncio de BVLGARY, una marca de joyas, donde vemos a una mujer embarazada que duerme una siesta con la mano recargada sobre su hijo que está por nacer. Si vemos el gesto de la mujer podremos compararlo con algunas pinturas de la virgen María. El fondo negro y la luz que ilumina representan un tipo de emisión que hace de punto focal en su cara y en el anillo que lleva en la mano. Unas manos masculinas hacen un encuadre de su cara, esto quiere decir, que es el padre del niño que la mujer lleva dentro, lo que lo convierte a él en un Dios creador de vida. Dándonos la idea de que él, un Dios ella una Diosa y los dos dan vida., por lo que merece el anillo. 

COMPARACIÓN ENTRE ELLOS

En la duplicación en estas obras de la imagen real, vemos como los cambios o distorsiones agudizan algunos aspectos de las obras y ponen de manifiesto las estructuras donde convergen los signos. Todos vivimos dentro de un orden simbólico, y las interpretaciones reposan sobre códigos culturales compartidos, así podremos saber que en la pintura de Wassyly el azul rey es el símbolo de lo profundo, de la tranquilidad, con poderes para eliminar energías negativas. En conjunto con el de Motherrwell el rojo es el símbolo de la pasión de la vitalidad del impulso de los seres humanos, visualizado en una playa que se genera en la realidad del individuo y en este último la combinación con naranja representa la juventud, el verano. En el cuadro religioso el amarillo es el símbolo de los iluminados, del buen humor y la alegría y el blanco la pureza, raro porque pocos sacerdotes que cargan la imagen azul tienen blanco. El verde la esperanza, el deseo de la vida eterna, por eso las paredes de la iglesia y la vestimenta de los feligreses es verde. Las paredes de la iglesia tienen sombra negra, que es el dolor, la desesperación, la infelicidad. Igualmente, en la otra pintura tenemos un horizonte negro, de incógnita, con un mar gris, que podría significar aburrimiento al ser un color neutro. Pero todos estos códigos han sido formados y evolucionan a lo largo de los procesos comunicativos, así el negro en el anuncio de BVLGARY ya no es dolor, incógnita, sino un color que enmarca su cara pero crea sobra para generar la tranquilidad del cuadro. Cuando los autores combinan todos estos elementos podemos ver la esencia de la relación de los emisores con el objeto que desean representar. En un caso en pintor que vivía cerca de la iglesia, la analizó tuvo su momento creativo, y lo simbolizo en un cuadro. En el otro los diferentes momentos del alma humana los pudo significar en un mar, y por último el comunicador visual tuvo la intensión de mercantilizar el anillo y vio en cada mujer embarazada una virgen y la figuró en una diosa. Tenemos la primeridad en los tres artistas los cuales tienen su momento creativo, donde captan las fuerzas para expresarse, comunicar, los tres tienen su propia red simbólica, pero también deconstruir el simbolismo preexistente. Mothernwell del estado de la juventud entre la pasión, en una realidad exaltada, en un mar que significa el espíritu aburrido, un presente u horizonte incierto. El joven de buen humor, amarillo pero por dentro infeliz o incierto. Un Wassyly con los sacerdotes iluminados cargando el símbolo del Dios, con personas desean y esperan la vida eterna, niños vestidos de rojo vital. La mujer de la publicidad en un rosa de divinidad. El autor toma una autoconciencia del lenguaje partiendo del objeto de representación, recordando fenómenos análogos para su representación. Estas tres obras de arte siempre se basan en un tiempo espacio real, la primera en una misa a principios del siglo pasado en Alemania, en una playa, y en una pareja, que se simbolizan con códigos compartidos para comunicar, esto es lo real, aquí hablamos de la segundidad. El código es un filtro, pero éste ya está pensado y como accedemos a este es la terceridad. Semiológicamente las características en común que tienen es que todas tienen un receptor, que descodifica y puede entender el simbolismo de las obras para mimetizarse en ella. Este receptor tendrá una red de símbolos que modificara su ideología. A mi gusto el fenómeno creativo de un autor no es una simbolización o códificicación cíclica, sino a manera de resorte, ya que todos los elementos a través de las representaciones comunicativas toman parte del código, regresan al mismo lugar para significar, pero toman parte de la subjetividad del artista, lo que los evoluciona a través del espacio tiempo, los hace cambiantes y no estáticos. BIBLIOGRAFIA Lotman, I. La semiosfera III, España, Cátedra, 1996, 57-122. Nicole, Everaert. “Magritte : de lo banal al misterio”, in LAPOUJADE, M.N. (compiladora), Imagen, Signo y Símbolo, Facultad de Filosofía y Letras de La Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, 2000.